Si un deportista está satisfecho con su desempeño en los días buenos pero no puede conseguir ese nivel de excelencia durante la competencia, puede haber una dificultad psicológica. Si el deportista no está satisfecho con su desempeño en los días buenos, entonces el inconveniente es de habilidad o entrenamiento, y no se basara en la psicología.
¿Cómo se distinguen los problemas psicológicos de las dificultades deportivas?
Uno de los inconvenientes más graves que puede afrontar un atleta es la asfixia, una reacción de estrés excesivo que resulta en una discapacidad para desempeñarse. Nideffer (1992) da un modelo de tal experiencia, referida por un tenista en un partido contra la tenista capacitado Tracy Austin. Cuando se tiene problemas de asfixia el atleta no tendrá ese rendimiento que desea, aunque en la mayoría de los casos es un problema que viene de nuestro subconsciente, creando un problema psicológico ante la realización de un deporte. Como muchos expertos indican todo está en la mente humana y es ella quien lo puede todo.
Pero cómo puede un atleta luchar con los nervios y la asfixia. Este punto depende del individuo y su contestación al estrés. El psicólogo deportivo Yuri Hanin indico que diferentes atletas cuentan con diferentes niveles de presión en los que se origina un rendimiento óptimo. Llamó a estas zonas de actividad óptima. Ciertos responden bien a la alta tensión aunque otros no lo hacen. Un atleta debe saber cómo dominar su estrés deportivo y así conseguir una mejor función de sí mismo.
Algunos generan presión pensando en lo elemental que será un juego o cuánto les aflige el equipo contrario. Otros, con niveles más bajos de angustia óptima, necesitan usar técnicas de relajación para entrar a un medio óptimo antes de la competencia.
La timidez crea dificultades de desempeño igualmente puede empeorarlos. A veces, la dificultad se acumula sobre sí mismo y empieza a afectar otras áreas del juego de un deportista.
Los psicólogos deportivos suelen luchar con la ansiedad o la asfixia, al ejercitar al atleta este se puede relajar, centrar y manejar correctamente las distracciones y el diálogo interno. Aunque puede tener consecuencias profesionales, causando efectos similares a la depresión. La mayoría de los atletas buscarán no pensar en el desempeño fallido, sino en las prácticas exitosas, porque no desean sentirse deprimidos.
La tecnología moderna puede ayudar a determinar el problema. Un ejemplo implicó una jugadora de tenis universitaria que necesito de ayuda psicóloga deportiva para poder llegar a la final y alcanzar su objetivo.